Participaron entre bastidores, colaborando en el vestuario y apoyo a los diseñadores y estilistas, ayudando a vestir a las modelos con las diferentes colecciones que desfilaron. Una oportunidad única para descubrir cómo se organiza un desfile profesional desde dentro: los tiempos precisos, la coordinación, la presión y la emoción que se respira antes de cada salida a pasarela.

“Fue increíble poder ver tan de cerca cómo trabajan los profesionales de la moda. Todo sucede muy rápido, pero hay un gran trabajo de equipo detrás de cada look”, comentaba una de las alumnas participantes.

Esta experiencia forma parte del compromiso de ESI por ofrecer a sus alumnos una formación conectada con el sector profesional, fomentando el aprendizaje práctico en entornos reales.